Cuando el tamaño de los senos es mayor a lo esperado para la contextura corporal suele producir problemas de postura, dolor crónico de espalda, sensibilidad, favorece la aparición de hendiduras en la piel de los hombros, infecciones crónicas por la humedad en los pliegues y por su puesto inconformidad por el aspecto físico y limitación para encontrar prendas adecuadas. La mamoplastia de reducción permite retirar el volumen sobrante y recrear la posición y aspecto de unos pechos más acordes con la figura de cada paciente. Es una cirugía realizada de manera ambulatoria y con anestesia general.

Dependiendo del tamaño y la cantidad de tejido sobrante será la extensión de las cicatrices. Trato de hacer cicatrices lo más pequeñas posibles que se pueden extender desde una forma de colombina a una J o una T invertida dependiendo del caso. Siempre tratando de hacerlas con una extensión limitada y camuflable.

La producción de leche suele depender del estimulo hormonal y de succión durante la época de lactancia. Si bien se extrae tejido mamario y quedan cicatrices internas la producción de leche es una característica muy personal. Hay mujeres que no producen una buena cantidad estén o no operadas.

Mediante el procedimiento se trata de dejar una forma y tamaño armónico de los senos sin embargo hay que tener en cuenta que la grasa de los senos sigue su fisiología normal, es decir que si la persona sube, baja de peso o lacta, el tejido responderá de manera normal como el resto del organismo y tendrá los cambios correspondientes. También el proceso de envejecimiento y el efecto de la gravedad seguirán su curso por lo que también habrán variaciones con el tiempo.

Usar el brassier indicado, evitar hacer esfuerzos y ejercicio durante al menos 4 semanas. Iniciar masaje en las cicatrices para favorecer su adecuada evolución .Seguir los controles indicados por su cirujano quien definirá que otras indicaciones específicas le dará según el caso.

Algunos de mis pacientes